Por: Redacción
Nueva York.-
La alcaldesa de Nuevo Laredo, Carmen Lilia Canturosas, colocó a la ciudad fronteriza en el escenario internacional al presentar ante la Organización de las Naciones Unidas el exitoso modelo de saneamiento del agua que hoy transforma la vida de miles de familias en la región.
“La dimensión de este esfuerzo va más allá de lo local. Logramos reducir en un 99 por ciento las descargas sin tratamiento al Río Bravo, pasando de 25 millones a menos de 300 mil litros diarios, en un cuerpo de agua que no divide, sino que une a México y a Estados Unidos”, expresó la edil durante su participación en el Foro Político de Alto Nivel sobre Desarrollo Sostenible.
Desde la tribuna de la Asamblea Plenaria de la ONU, Canturosas explicó que el proyecto representa una inversión histórica de 81.2 millones de dólares, lograda mediante un modelo de coinversión entre los tres niveles de gobierno en México, la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos, el Banco de Desarrollo de América del Norte y la Comisión Internacional de Límites y Aguas.
Las obras comprenden 45 intervenciones de infraestructura básica en zonas rezagadas de Nuevo Laredo, lo que ha permitido garantizar el acceso regular al agua potable a más de 17 mil personas que antes carecían de este derecho fundamental.

La mandataria también destacó la infraestructura de reúso, que hoy sustituye hasta un 30 por ciento del consumo industrial de agua potable, consolidando así un modelo integral de gestión hídrica con impacto regional.
Canturosas reconoció que estos logros no hubieran sido posibles sin el respaldo decidido del Gobierno de México, encabezado por la Dra. Claudia Sheinbaum, y del Gobierno del Estado, liderado por el Dr. Américo Villarreal Anaya.
“Desde Nuevo Laredo, reiteramos con respeto y compromiso: los territorios tienen mucho que aportar. Y cuando se nos brinda la oportunidad de actuar, lo hacemos con responsabilidad, apertura y vocación de servicio. Porque cuando un territorio se alinea con una causa global, no sólo transforma su presente: también abre camino para un futuro común”, enfatizó.

La participación de la alcaldesa en este foro internacional representa un hito histórico para la ciudad, al posicionarla como ejemplo mundial de cooperación transfronteriza y desarrollo sostenible.
Nuevo Laredo demuestra que las ciudades fronterizas pueden ser catalizadoras de transformación y esperanza, convirtiendo los desafíos geográficos en oportunidades que trascienden fronteras y contribuyen al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030.