Por: José Bojórquez
Ciudad del Carmen, Campeche.-
Con 87 horas continuas de bloqueo sobre la carretera federal 180, habitantes de Nuevo Progreso, en la Península de Atasta, lanzaron una advertencia directa al gobierno: si no inicia de inmediato la construcción de la subestación eléctrica prometida, exigirán la renuncia de autoridades clave, incluyendo a la secretaria de Gobierno, Liz Hernández.
“El pueblo pone, el pueblo quita”, sentenciaron los inconformes en un manifiesto dirigido a la presidenta Claudia Sheinbaum, con copia a la gobernadora Layda Sansores y al alcalde Pablo Gutiérrez Lazarus.
Los manifestantes reclaman el cumplimiento de compromisos firmados entre autoridades estatales, municipales y la CFE, tras años de promesas incumplidas. Demandan la presentación pública del proyecto formal de la subestación eléctrica, el arranque inmediato de su construcción, el restablecimiento eficiente del suministro eléctrico y un “borrón y cuenta nueva” en los adeudos que los habitantes de la península tienen con la paraestatal.
Además, exigen que ningún participante en la protesta sufra represalias por parte de la Guardia Nacional ni de ningún otro órgano de gobierno.

La protesta no es arbitraria —señalaron los pobladores—, sino el resultado del hartazgo acumulado. El bloqueo, que ya afecta una de las vías más importantes del estado, se mantendrá hasta que haya una respuesta clara y contundente de las autoridades.
Los habitantes dejaron claro que no aceptarán más demoras ni discursos vacíos: “Si no cumplen, se van.”