Dentro del Emparrillado. En la NFL ya no manda nadie

19 Oct 2025 | Deportes

Por Raúl S. Llamas

Bienvenidos al espectáculo más impredecible que recuerdas.

Si te creías dueño de un “juego seguro”, esta temporada te ha colgado un cartel de venta cancelada.

Porque sí: la NFL 2025 no está cumpliendo con ningún guion, y eso, mis amigos, es el argumento perfecto para escribir sin filtros.

Olvida al equipo invencible que repetía victorias sin pestañear.

Un reciente análisis señala que “esta liga no tiene equipos dominantes… la supremacía parece un mito en el presente calendario”.

Y es cierto. Los gigantes habituales tambalean, y los aspirantes ya miran a sus rivales con más precaución que al calendario.

En la última jornada, los Bengals de Cincinnati se encargaron de agotar el reloj y, con un gol de campo, se llevaron el triunfo ante unos Steelers de Pittsburgh que quedaron boquiabiertos.

Ese equipo que muchos daban por muerto se levantó y dijo: “No, aún no”.

Los aficionados están comprobando que su fidelidad vale oro… para la televisión.

Los Dolphins, con un tres por ciento de confianza entre su propia afición —la cifra más baja registrada—, lo dicen todo.

Y entiendo la desesperación: el equipo que esperabas ver levantar cabeza ya no existe. O al menos no se levantará como antes.

La liga te obliga a estar alerta, a mirar los tableros con lupa y a cambiar pronósticos como quien cambia de canal.

¿Creíste que un buen entrenador lo era todo? Pues no. Los Titans lo aprendieron por las malas: arrancaron 1–5 y dijeron adiós a su head coach Brian Callahan. No es solo un cambio de hombre; es un síntoma de pánico estratégico, patadas al tablero y decisiones que tienen más de “intento desesperado” que de “plan maestro”.

Mientras los errores se multiplican, los ingresos no.

La liga sigue creciendo, los contratos se inflan, pero en el terreno la conexión entre talento y ejecución parece cada vez más lejana.

La temporada 2025 demuestra que para ganar ya no basta el talento puro: hay que adaptarse, improvisar y aceptar que lo viejo ya no alcanza.

¿Mejoras estructurales? Sí.
¿Un equipo que domine como antes? No por ahora.

Esta temporada pide análisis, paciencia y la certeza de que el dominio absoluto hoy es un lujo reservado para nadie.

La NFL 2025 corre al ritmo de lo incierto, y eso la hace más interesante.

Porque si algo queda claro, es que una liga aburrida no vende boletos. Y esta temporada… vende, cobra y sorprende.

Prepárate, porque el próximo touchdown podría venir de quien menos lo imaginas.

Y hablando de sorpresas, el lunes los Buccaneers podrían dar un golpe sobre la mesa.

Si vencen a Detroit de visitantes, con tantas bajas, convencerán hasta al más escéptico. La buena noticia para Tampa Bay es que su defensa contra la carrera es de primera línea, con Vita Vea como ancla.

Si logran frenar el ataque terrestre de los Lions —como anticipan los analistas—, los Bucs demostrarán que aún pueden rugir, incluso con la ofensiva cojeando.

Las carpetas ya no esconden al favorito, los entrenadores tiemblan y los aficionados miran con más preocupación que esperanza.

La liga cambió por completo.

¡TOUCHDOWN!

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