Vibra Imperio Hoysala en su legado en el Templo Chennakeshava de Belur

16 Dic 2025 | Cultura

Por: Ankit Mittal

Belur, India.- El Templo Chennakeshava, joya arquitectónica del siglo XII y uno de los máximos exponentes del arte Hoysala, se levanta sobre una amplia plataforma estrellada que permite la circunvalación ritual, integrando una compleja planta de cruz latina con brazos y cabecera de once puntas, concebida para albergar la triple advocación de Vishnu: Keshava, Janardana y Krishna.

“El templo fue concebido como una declaración de poder, fe y sofisticación artística del Imperio Hoysala”, describen las crónicas históricas que documentan su traza monumental y su simbolismo religioso.

Mandado construir en 1117 después de Cristo por el rey Vishnuvardhana, el recinto —también conocido como Keshava, Kesava o Templo Vijayanarayana— se localiza a orillas del río Yagachi, en Belur, una de las primeras capitales del Imperio Hoysala, dentro del actual distrito de Hassan.

La edificación del templo se extendió a lo largo de tres generaciones y requirió 103 años para su conclusión, reflejando no solo la ambición del proyecto, sino también la continuidad política y cultural del reino que lo impulsó.

A lo largo de su historia, el Chennakeshava fue dañado y saqueado en repetidas ocasiones durante conflictos bélicos, lo que obligó a sucesivos procesos de reconstrucción y restauración que hoy forman parte de su compleja narrativa histórica.

Belur, conocida antiguamente como Velapuri, Velur o Belapur, consolidó su prestigio gracias a este complejo religioso, edificado para conmemorar la victoria de Vishnuvardhana sobre los Cholas en 1116 después de Cristo.

La tradición atribuye su ejecución a los maestros artesanos Dasoja y Chavana, padre e hijo, cuyas manos dieron forma a uno de los conjuntos escultóricos más refinados de la India medieval.

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