Por: Redacción
Austin, Texas.-
El Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS) ordenó este viernes la evacuación del Capitolio Estatal y sus alrededores, luego de identificar lo que calificó como una “amenaza creíble” dirigida a legisladores estatales que planeaban asistir a una protesta convocada por organizaciones progresistas.
“Se decidió evacuar el edificio por un exceso de precaución. Ya se ha abierto una investigación formal sobre la amenaza”, informó el DPS en un comunicado, mientras elementos de seguridad resguardaban la sede legislativa en el corazón de Austin.
Las protestas, que coinciden con el cumpleaños del presidente Donald Trump y un desfile militar en Washington por el 250 aniversario de las Fuerzas Armadas, han generado un clima de tensión. Se espera que se realicen más de dos mil manifestaciones en los 50 estados del país, como parte de una jornada de rechazo al «autoritarismo del gobierno republicano», según los convocantes.
La violencia escaló de manera trágica con el asesinato de la legisladora demócrata Melissa Hortman y su esposo, en un aparente ataque político. Así lo confirmó el gobernador Tim Walz en conferencia de prensa, quien calificó los hechos como “inaceptables e indignantes en cualquier democracia”.
En un segundo hecho vinculado al mismo sospechoso, el senador estatal demócrata John Hoffman y su esposa fueron atacados a tiros y resultaron heridos. Las autoridades indicaron que el agresor se hizo pasar por policía, portando chaleco antibalas, arma de fuego y una placa falsa al momento de los atentados.
Hasta el momento no se ha revelado el nombre del atacante ni su vínculo con algún grupo extremista. El FBI y otras agencias federales se han sumado a las investigaciones para determinar el trasfondo del crimen y su conexión con la jornada nacional de movilizaciones.
El ambiente en Texas es de máxima alerta, mientras líderes estatales y federales llaman a la calma y condenan cualquier expresión de violencia contra servidores públicos.